Skip to main content
Si haces clic en un enlace y realizas una compra es posible que recibamos una pequeña comisión. Lee nuestra política editorial.

The Legend of Zelda: Skyward Sword

¿El último gran juego de Wii?

Después del relativo chasco que supuso Twilight Princess (que está lejos de ser un mal juego, pero hizo mucho menos ruido del que se esperaba y quizá trascienda menos de lo que merece), las expectativas son muy altas con este The Legend of Zelda: Skyward Sword. No es para menos, siendo el primer Zelda para sobremesas en cinco años: ha pasado mucho tiempo y los fans necesitan su dosis de Link. Pudimos asistir a una presentación hands-off en el showroom de Nintendo y las sensaciones son muy buenas: parece que la saga está en su mejor momento y que Wii va a recibir uno de los mejores juegos de su catálogo.

La presentación comenzaba como el famoso vídeo 'Romance', en el que se perfilaba la relación de Link con esa nueva Zelda que ya no es princesa sino una amiga de nuestro protagonista. Después de la intro, donde se nos explica por qué la gente pasó de vivir en las tierras inferiores para pasar a construir ciudades en el cielo, Link recibe una carta en la que Zelda le recuerda que han quedado en verse antes del Torneo Celeste. Este Torneo es una competición en la que los jóvenes de la escuela compiten a lomos de sus pelícaros, esos pájaros gigantes que hacen la función del barco de Wind Waker; Link está a punto de participar en ella, y el segmento de juego que hay desde el principio hasta que Link hace la competición funciona como tutorial en el que aprendemos los mecanismos básicos, que no han cambiado demasiado pero sí tienen un par de añadidos considerables.

Parece que esta vez habrá algo (más) entre Link y Zelda.

El mayor quizá sea el medidor de resistencia que se ha añadido. Link ahora es más ágil, corre más, salta más, tiene más recursos para moverse por los escenarios, pero también se cansa: gestionar correctamente esta resistencia durante las mazmorras y combates puede añadir un poco de profundidad a la jugabilidad que seguro sentará muy bien al juego. En los diálogos también un pequeño añadido: las varias posibilidades de respuesta. Hasta qué punto influyen en el juego es algo que no sé a ciencia cierta, pero por lo que pude ver parece que nuestras elecciones no tienen un peso crucial y se limitan a modificar ligeramente el diálogo.

Durante esta primera parte tenemos el primer contacto con las mazmorras, cuando nuestro pelícaro es encerrado por los chicos malos de la escuela y tenemos que ir a sacarlo de ahí para participar en el Torneo. Es aquí donde nos familiarizamos con el uso de la espada, que tiene buena precisión gracias a Wii Motion Plus, pero también con algunos mecanismos de puzzle básicos: mover cajas para acceder a zonas superiores, trepar, movernos por salientes...

El Torneo sirve para familiarizarnos con nuestro pájaro, un compañero que parece tener bastante importancia en el juego: la relación de Link con el pelícaro sale varias veces en las conversaciones, donde se deja claro que es un animal con un vínculo especial con su dueño. No cuesta demasiado superar el Torneo, y justo después empieza la parte más importante de la presentación: aquella en la que Link descubre que es el elegido para liberar las tierras inferiores del mal que las somete.