R.U.S.E.

¿Pero me tragaré yo su reacción? ¿Y por qué debería hacerlo? "[nosotros] tenemos que enseñarle a la IA que un desconocido número de fuerzas enemigas en camino es un peligro," dice Girard, "de forma que pueda enviar algunas fuerzas aunque sean nuestros señuelos. La IA realmente es capaz de saberlo, porque tiene acceso a la memoria del ordenador, pero tienes que enseñarle como puede ser engañada por las acciones del enemigo". En el segundo intento la cosa me sale mucho mejor, utilizando silencio de radio y señuelos a la vez, y llamando a otro elemento no-ruse - la opción de llamar a bombarderos de los portaaviones que están en la costa. Puedes usar hasta cuatro a la vez, tras cual tienen que volver para repostar combustible antes de poder usarse otra vez.

Más seguro de mi mismo, ahora estoy listo para el mayor desafío que supone Monte Cassino. Mientras que el nivel de Túnez representa un escenario típico de RTS, Monte Cassino te ofrece una pequeña cantidad de unidades y te pide liberar la ciudad sobre la montaña, en un área repleta de fuerzas italianas del Eje. Las buenas noticias para los aliados son, bueno, que ellos también tienen aliados. En este caso, mientras mi unidad compuesta por tres tanques cruza los campos italianos bajo la cobertura del silencio de radio para eliminar baterías antiaéreas, la marina de guerra británica mantiene ocupado al enemigo con bombardeos de larga distancia. Eso les enseñará la lección por adoptar el Nacional Socialismo.

"Creo que estamos enfocando en género desde un ángulo diferente", dice Girard cuando termino de jugar, "porque es más sobre el tablero, el plan de batalla, las estrategias, así que es como ser el general en vez de un capitán o un teniente en el campo de batalla". Si alejas la cámara, las unidades parecen como fichas de poker sobre el escenario. Si la alejas todavía más, te das cuenta de que las líneas negras en el horizonte no son un error de la beta - son los límites del tablero en los que tú y los otros generales estáis examinando el mapa para planear el siguiente movimiento.

Pese a que al hacer mucho zoom se pueden unos gráficos y animaciones algo blandos, el entorno - creado a partir de mapas de satélite, aparentemente - y los efectos son una compensación decente. La rueda de zoom no es la única novedad de RUSE: Ubisoft también ha estado mostrado el juego en pantalla táctiles giganes - en este caso una mesa IntuiSense - en la que se juega como un gran juego de iPhone. Hay algo de lag en el control cuando lo pruebo, pero hay mucho bueno que decir sobre moverte por el mapa deslizando dos dedos sobre la superficie, emulando a Tom Cruise en Minority Report. "No puedo date una respuesta concreta al 100%, pero hay muchas posibilidades de que cuando el juego esté a la venta sea compatible con dispositivos multitáctiles", responde Girard cuando le pregunto por el soporte de Windows 7 a este tipo de aparatos.

Girard es menos ambiguo al hablar del multijugador. RUSE tendrá soporte para partidas cuatro contra cuatro, tiene "un buen número de mapas - al menos el mínimo que esperarías en un RTS", un modo escaramuza que mezcla IA y jugadores humanos, y "otro modo que vamos a desvelar en Colonia". ¿Un jugador o multijugador? Pausa. "¡Ambos!". Algo que no habrá, sin embargo, es un editor de niveles. "No es algo simple", dice Girard, tratando de no lamentarse por el uso de satélites para crear los escenarios. "Los mapas son preciosos, pero también bastante complejos".

Lo más esperanzador de todo esto, sin embargo, es que todas las preguntas sobre la segunda guerra mundial y los controles en consola se han evaporado (los controles de PC también son básicos e intuitivos). "La profundidad del juego no se reduce por el hecho de que juegues con el pad", dice Girard. "Al ser un juego sobre estrategia, sobre grandes planes de batalla, no necesitas micro-acción o montones de atajos de teclado". Es casi incorrecto llamarlo RTS, le sugiero. "Quizás lo puedas llamar estategia real. En tiempo real".