Varios testimonios detallan la "cultura del silencio" en Paradox Interactive frente al acoso a empleadas

El periódico sueco Svenska Dagbladet ha publicado un informe sobre la "cultura del silencio" en Paradox Interactive.

En septiembre se filtraron los resultados de una encuesta interna en el que la mayoría de las empleadas afirmaban haber sufrido discriminación o acoso laboral que puso el foco en la compañía especializada en juegos de estrategia.

Svenska Dagbladet ha estado hablando con varias empleadas y exempleadas de la compañía que han hablado de numerosos casos de discriminación en la empresa y las dificultades para reportarlo.

Uno de los incidentes se refiere a la contratación de un alto cargo que tenía fama de "acoso y acercamientos no deseados". En 2016, pocos meses antes de entrar en Paradox, había tenido que pagar 270.000 coronas suecas (unos 27.000 euros) a una empleada de su anterior compañía para cerrar una demanda por acoso. Permaneció en su puesto en Paradox hasta agosto de este año.

Según el informe de Svenska Dagbladet la jerarquía de la empresa estaba dominada por hombres y gran parte del acoso se producía hacia empleados en categorías inferiores. Una mujer comentó cómo un superior le obligó a salir de una reunión y eliminar una crítica de la empresa en un Slack (una herramienta para gestionar tareas) interno en su presencia.

Nuestros compañeros de Eurogamer han hablado con varias mujeres sobre sus experiencias en la compañía, que han preferido permanecer en el anonimato por miedo a represalias. Una de ellas comentaba cómo era la única mujer en las reuniones y otros empleados espetaban su opinión diciendo que había sido contratada "de forma simbólica" y que "debería callarse." En su opinión, era "difícil ser una mujer en la compañía" y estaba segura de que si su comentario viniera de un hombre "se habría considerado una opinión válida."

Al parecer, uno de los problemas a la hora de hablar en voz alta de estos problemas es el reducido tamaño de la industria sueca del videojuego, en la que Paradox tiene un gran tamaño e influencia. En 2019 había 1226 mujeres en la industria sueca del videojuego, en torno a un 21% del total. En torno a 140 pertenecen a Paradox, que contaba con 662 empleados en 2020 y tiene un porcentaje de empleadas similar al del resto de la industria de su país.

Por este motivo pocas empleadas se atreven a dar su opinión en las encuestas internas que lanza Paradox; según comentaban a Eurogamer, muchas de ellas no tenían claro que las respuestas fueran realmente anónimas y "nadie se atrevía a escribir lo que realmente querían en ese tipo de encuestas."

Un representante de Paradox ha publicado una respuesta al informe de Svenska Dagbladet diciendo que la encuesta que se filtró era un "estudio informal" con un "una muestra limitada de respuestas (menos del 20% de nuestros empleados globales", que era "difícil actuar inmediatamente antes de realizar una investigación más amplia" y para ello ha contratado a un auditor externo e independiente.

Eurogamer pidió más información al respecto a Paradox pero el estudio ha declinado comentar más porque aseguran que están pendientes del resultado de una auditoría externa.

Una de las entrevistadas comentó a nuestros compañeros que Paradox podría cambiar "si los altos cargos están dispuestos a ayudar, si están dispuestos a cambiar su percepción de lo que es acoso" y añade que "hay acoso en Paradox que la gente está negando porque no creen que sea acoso. Creemos que es normal, porque es a lo que están acostumbrado, esta cultura se ha perpetuado durante años y años y años. Y algunas personas nunca han visto nada distinto."