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Avance de Metal Gear Survive

Gear Walker with Me.

En Konami saben que con Metal Gear Survive tienen entre manos una tarea muy difícil: poner de su parte a un público que ha crucificado el juego de antemano. En la sesión de juego donde lo probamos no paraban de repetirnos la importancia de iniciar nuestra primera partida (ninguno de los presentes en la sala lo habíamos probado antes) con la mente abierta y sin prejuicios unos días antes de que la beta abierta permita probarlo a todo el mundo. En esta demo pudimos probar tanto el modo un jugador como un par de misiones del multijugador cooperativo para cuatro jugadores. El tramo que jugamos del modo un jugador transcurría aproximadamente entre treinta y cuarenta y cinco minutos después del inicio, tras el tutorial básico de movimientos y la presentación de personajes. Aparecimos directamente en los restos de Mother Base, con una barra de hierro afilada como única arma de defensa personal y con un personaje hambriento y sediento.

La primera misión consiste en cazar unas ovejas y recoger agua de una charca para saciar el hambre y la sed, que son son más protagonistas de lo que se podía intuir en los tráilers, al menos en un tramo inicial del juego donde no abundaban demasiado las presas ni el agua limpia. Hay que estar atento en todo momento, ya que si bajan demasiado se nublará la vista del personaje y le costará apuntar correctamente. Hay que acordarse de pausar correctamente la partida si no vamos a estar jugando o, como le ocurrió a mi personaje en el descanso entre sesiones, el protagonista morirá de inanición en apenas cinco-diez minutos. La búsqueda de recursos es una de las mecánicas más importantes del juego; gran parte del tiempo estamos buscando comida y componentes con los que fabricar armas, protecciones, comida más nutritiva... en cada expedición es vital conseguir todos los materiales posibles para luego poder pasar un tiempo en Mother Base reparando y construyendo lo que necesitamos para seguir adelante.

Pronto nos tocará pelear también con zombis, el otro gran pilar del juego. Es un tipo de enemigo que a priori no es tan interesante de eliminar en un sistema de combate como el de Metal Gear Solid V, así que Konami ha optado por introducir varios cambios. Resulta complicado resolver situaciones con combate, priorizando en su lugar el control de la masa de zombis con distracciones y el uso de vallas (que podemos invocar en cualquier sitio y en cualquier momento momento con el iDroid si las hemos fabricado previamente) para distanciarnos y atacar cuerpo a cuerpo sin sufrir daños. Las armas de fuego han perdido mucho peso, hasta el punto en que era posible pasarse la demo sin encontrar los planos que nos permitían fabricar la pistola.

La pantalla de Game Over termina apareciendo bastante más a menudo de lo esperado. Los enemigos son lentos y no muy inteligentes, pero en espacios reducidos son letales y cualquier desliz nos deja al descubierto ante unos rivales que en unos pocos golpes nos eliminan. Espero que de cara al juego final se incluya un sistema de checkpoints, ya que ahora mismo la muerte nos hace perder todo el progreso de la misión y nos devuelve a Mother Base. Los desplazamientos no son especialmente rápidos, así que cada muerte nos hace perder una cantidad de progreso demasiado grande.

Uno de los motivos de la lentitud del juego es uno de los cambios más radicales con respecto a la fórmula de Metal Gear: movimientos como correr, andar en cuclillas o reptar en el suelo consumen stamina, así que dejan de formar parte de nuestro conjunto básico de habilidades para convertirse en recursos que debemos emplear solo en momentos concretos. Es quizá el cambio que tengo más curiosidad por ver cómo funciona en el juego completo, porque con la barra de stamina que tiene nuestro personaje al principio del juego resulta cargante tener que pararse cada quince segundos a descansar para poder reptar por el suelo. Para paliarlo en cierta medida, en una de las misiones pudimos activar un agujero de gusano que nos permite el teletranporte a lo largo del mapa. Estas misiones consisten en evitar la llegada de enemigos y tienen algo más de estrategia que el resto, que se remitían al clásico esquema sandbox "ve, coge un objeto y vuelve", aunque la que probamos llegaba a ser un poco desesperante ante la falta de recursos para defendernos de las oleadas de zombis.

Hay muchos otros cambios pequeños, sobre todo a nivel de interfaz: un sistema de niveles que permite mejorar las estadísticas del personaje, el mapa está oculto y solo se actualiza al volver a Mother Base, la UI es más intrusiva al requerir más información en pantalla, el tipo de valla equipada tiene la misma importancia en el HUD que el arma principal, hay un sistema de curación con ligeras reminiscencias a MGS3... Tampoco nos dio tiempo a trastear a fondo con el iDroid, pero quedaba claro que escondía más submenús de los que podíamos controlar en apenas un par de horas de juego.

Una vez terminó la sesión de juego un jugador pudimos probar un rato del multijugador. Las misiones que pudimos jugar consistían en defender una máquina que tenía ocho "barras de vida": cada vez que perdía una barra se generaba una explosión que dañaba a los enemigos cercanos, pero al llegar a cero se acababa la partida. En este modo pudimos observar a algunos tipos de enemigos que no nos dio tiempo a ver en la campaña, como zombis que explotaban al sentirse en peligro o zombis blindados. Lamentablemente no fue una sesión muy productiva debido a limitaciones de tiempo en el modo un jugador. Como quizá ya sepáis, Metal Gear Survive es un título always online y los recursos se comparten entre la partida del modo un jugador y la del multijugador, de manera que nos enfrentamos cuatro jugadores de nivel 3-5 contra hordas de enemigos de nivel 10 habiendo gastado casi todos nuestros recursos en las misiones del modo un jugador y, como era de esperar, no pudimos superar el reto.

La sesión de juego con Metal Gear Survive ha conseguido generar más interés en el juego del que tenía antes de probarlo, pero también ha dejado algunas dudas en el aire: qué tal funciona la integración entre campaña y multijugador en la práctica, qué peso tendrán las armas de fuego en la partida final, si existirá mayor variedad de misiones y enemigos, si la historia tendrá algún interés más allá de la anécdota... cuestiones que solo se pueden resolver probando el juego final.

Metal Gear Survive se pondrá a la venta el día 22 de febrero para PC, PlayStation 4 y Xbox One. La beta abierta se celebra del 18 al 21 de enero.

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Metal Gear Survive

PS4, Xbox One, PC

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Jaime San Simón

Redactor

Jaime lleva en Eurogamer.es desde los inicios y es nuestro experto en juegos indie. Tú ponle ahí cuatro píxeles hechos con amor y ya le puedes dar megatones hiperpoligonizados, que él, se quedará con lo primero.

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