Skip to main content

Cómo recuperar al perro en Kingdom Come Deliverance 2

Chucho te ayudará en las peleas.

Kingdom Come Deliverance 2, la secuela del popular juego de mundo abierto y simulación medieval, ya está entre nosotros. Para sumergiros en este mundo, que aspira a dejarnos vivir de primera mano como si estuviésemos en el siglo XV.

Pero eso también significa que algunas de sus mecánicas serán un poco opacas y, quizás, necesitéis algo de ayuda para dominarlas. ¡No pasa nada! En nuestras guías podréis encontrar todo lo que necesitéis para moveros con soltura por Kingdom Come Deliverance 2. Por ejemplo, podéis visitar nuestra guía sobre cómo conseguir un caballo para recorrer más rápido el mapa.

En el mundo de Kingdom Come Deliverance 2 también tendremos que enfrentarnos a unos cuantos combates. Para hacerlos más sencillos, querremos a nuestro lado la compañía de Chucho, el fiel can que ya aparecía en la primera entrega. Pero hay un problema: le perderemos la pista al principio de la aventura. ¡No pasa nada! En esta guía os explicamos cómo recuperar a Chucho en Kingdom Come Deliverance 2.

Cómo conseguir al perro en Kingdom Come Deliverance 2

Tras los acontecimientos del prólogo, no solo perderemos la pista de nuestro caballo, sino también de Chucho, el fiel perro de Henry. Recuperarle forma parte de una misión secundaria, pero seguro que querréis saber dónde se encuentra, porque además, puede ser un aliado. Tanto a la hora de buscar pistas como en combate, si le ordenamos atacar a un enemigo, puede ayudarnos a que descuiden sus defensas y así poder asestar un golpe definitivo, algo que ayuda considerablemente a equilibrar la balanza en combates desequilibrados.

No es complicado recuperar a Chucho, pero sí es un camino bastante más largo de lo que podamos imaginar en un principio. Por tanto, quizás sea recomendable que vayáis primero a recuperar al caballo y así hacer más llevaderas las largas distancias que toca recorrer.

No hay mucha pérdida, eso sí, más que ir siguiendo los indicadores de la misión que nos marca el juego, tomando como punto de partida la casa de Bojhena, lugar que ya conocemos de recuperarnos de nuestras heridas. Nos hablará de un pastor y de un guardabosques. Así que simplemente toca ir en su búsqueda.

Cuando vamos a la zona del pastor nos hablará de una zona cercana en la que los lobos están atacando a su rebaño, así que toca observar la situación. Nos ofrece una de sus ovejas como cepo aunque, si lo preferís, podéis poner un trozo de carne en la encina que nos indica la ubicación para aguardar a la manada. Una vez ahí, veremos que Chucho no está entre ellos. Podemos acabar con los lobos o escabullirnos de ahí para hablar con el pastor. En nuestro caso, le dijimos una pequeña mentira diciéndole que nos habíamos ocupado de la manada y… funcionó.

El siguiente paso es ir a la casa del guardabosques… pero, como os podréis imaginar, tampoco está ahí. Su mujer está muy preocupada porque no ha aparecido y su hijo se queja de que su padre se pasa todos los días borracho. Más allá de la discusión familiar, toca ir al bosque a por él. Allí nos lo encontramos subido a un árbol, obviamente borracho y rodeado de una manada de lobos de los que tendremos que ocuparnos.

Una vez hecho eso, y teniendo en cuenta el estado de nuestro aliado, toca cargar con él a hombros hasta su guarida secreta. Ahí nos pedirá, si queremos que nos ayude, busquemos por la zona a su caballo. Lo encontramos con cuatro bandidos que nos pondrán las cosas difíciles. Es recomendable intentar acabar con ellos de forma sigilosa, al menos con todos los que podáis. También podéis probar a alcanzar el caballo y salir de ahí por patas, aunque lo normal es que os pillen o que el caballo se revuelva y os tire al suelo.

Una vez hecho eso y con el guardabosques en su hogar, nos dirá que sabe de otra manada de lobos por la zona de Semin, cerca de donde iniciamos la búsqueda. Allí por fin encontraremos a Chucho, que se había unido a una manada. Pero los lobos no nos lo pondrán sencillo, así que toca enfrentarnos a ellos con la ayuda de nuestro can. Una vez hayamos acabado con la manada, Chucho se unirá a nosotros poniendo fin a un ansiado reencuentro.

También te puede interesar