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Avance de Theatrhythm Final Fantasy

El mejor Final Fantasy para una consola de Nintendo en mucho tiempo.

Final Fantasy ha tenido una relación problemática con las últimas plataformas de Nintendo. Los ligeramente decepcionantes Crystal Chronicles eran un segundo plato de la saga principal, la cual no estaba disponible en las consolas de la gran N. Siendo así no resulta extraño que el anuncio del impronunciable Theatrhythm, un spin-off de Final Fantasy en forma de juego rítmico, no generase demasiado entusiasmo entre unos fans que pensaban que este nuevo título para 3DS no es más que otro experimento derivativo.

Pero Theatrhythm, quizás de forma ilustrativa, no hace mención a la serie Crystal Chronicles. La banda sonora del juego consiste en remezclas de temas de la saga Final Fantasy Principal, con apariciones de todas las entregas. Empezando por el chiptune 8 bits de Final Fantasy para acabar con las piezas orquestales de Final Fantasy XIII, esta será la primera vez que escuches el One Winged Angel de Final Fantasy VII en una consola de Nintendo.

Theatrhythm mantiene una dosis familiar de elementos RPG a pesar de centrarse en la música y tener una historia menos elaborada. Reclutas a un grupo de cuatro personajes sacados de un enorme grupo de favoritos de los fans, cada uno de ellos redibujado en estilo chibi. Todos empiezan como novatos de nivel 1. "Piérdete", grita Lightning, la heroína de Final Fantasy XIII. "¡No soy un héroe!", se lamenta Cloud, de Final Fantasy VII. Por suerte estos débiles personajes pueden subir de nivel, aumentando sus estadísticas y desbloqueando habilidades.

Una vez has montado tu grupo, es hora de ir a la batalla. Las canciones del juego se dividen en tres estilos jugables, siendo el primero los rápidos himnos de batalla. Aquí las notas vuelan hacia tu grupo mientras tratas de vencer a un conjunto de enemigos antes de que termine la canción. Las notas se tocan en la pantalla táctil, manteniendo algunas o arrastrándolas en una determinada dirección. El nivel de fuerza de los personajes y sus atributos mágicos ayuda a progresar, obteniendo XP (o "Rhythmia") al eliminar enemigos más fuertes y jefes finales.

También hay canciones más relajadas, en las que mueves el stylus al ritmo de lineas musicales curvas que aparecen en la pantalla inferior. Las stats de agilidad y suerte de cada miembro del grupo te dan más puntos, algo que también ocurre en el tercer tipo de canción, las de evento. Las canciones de evento suenan durante cinemáticas sacadas de su correspondiente juego original, mientras debes seguir el cursor de la nota que vuela por la pantalla.

Si pierdes o tocas mal alguna y te dan una puntuación 'mala', pierdes vida. Si la pierdes toda, obviamente el juego se acaba. Ganas XP al completar grupos de notas y puntos extra. Cada canción tiene una Feature Zone, una secuencia especial que desbloquea bonus de puntuación si consigues hacer todas las notas. Hay música de batalla, carreras de Chocobos y un verso extra en las canciones de evento.

Puedes jugar al juego en el modo Historia, en el cual una selección de canciones de un Final Fantasy en particular suena de forma secuencial, en el modo Challenge para probar de forma individual temas desbloqueados o en el Chaos Shrine, hogar de los retos más duros de Theatrhythm y de algunos temas exclusivos.

Theatrhythm tiene tres niveles de dificultad, cada uno desbloqueable cuando terminas el anterior. El inicial ofrece una introducción sencilla al juego, pudiendo conseguir fácilmente el rango 'S'. Es algo bueno, porque las encantadoras animaciones chibi y las cinemáticas te distraen y hacen que tu atención por las notas se desvíe.

Al completar una canción te regalan premios y mejoras, llevándote al Museo del juego, donde puedes desbloquear piezas de fan-service como álbums de cartas coleccionables de Final Fantasy. Si consigues pasar una de las primeras canciones con una precisión casi perfecta cada uno de tus personajes subirá varios niveles de golpe. Eso te dará acceso a habilidades bastante útiles, como una mejora de fuerza para la barra de vida o super-ataques cada vez que consigas enlazar correctamente varias notas.

Es discutible qué incentivo hay a mezclar a tus cuatro personajes con una docena o más de variables, en vez de simplemente centrarte en tu favorito. Aquellos que busquen las mejores puntuaciones posibles descubrirán que hay personajes concretos que se adaptan mejor a un determinado tipo de grupo, aunque escoger un grupo y subirlo de niveles es la forma más rápida de acceder a mejores poderes.

Sea cual sea el camino que escojas, necesitarás un grupo muy fuerte para jugar en el modo Chaos Shrine, hogar de varios medleys con dos canciones de rock. Su alto nivel de dificultad implica jugosos premios, con múltiples jefes finales disponibles en cada medley (o 'nota oscura') y premios como trozos de cristal para desbloquear personajes extra.

Al completar una nota oscura se desbloquea otra, o puedes acceder más rápido a más a través de StreetPass con otros jugadores. El modo StreetPass de Theatrhythm te permite crear un perfil, junto con una tarjeta de visita y una canción del Chaos Shrine. Puedes coleccionar diferentes tarjetas de perfil (o 'ProfiCards') e intercambiarlas, como en la propia Plaza Mii de 3DS.

El juego también saca partido a una de las últimas características añadidas a 3DS: el contenido descargable. Fue uno de los primeros juegos en añadir contenido premium adicional en Japón, donde se han vendido cientos de miles de copias. Square Enix traerá contenido descargable también a Europa, y es fácil de encontrar: el acceso está situado justo debajo del "pulsa para empezar" del menú principal.

Theatrhythm: Final Fantasy es una curiosa mezcla de lo viejo y lo nuevo: sus clásicas canciones son testamento de la querida herencia de la saga, pero todo ello está envuelto de un nuevo aspecto. Quizás no sea el Final Fantasy que esperábamos para una consola de Nintendo, pero Theatrhythm hace su trabajo de forma estupenda. Su jugabilidad tipo portátil es perfecta para la 3DS y cumple con creces su objetivo de homenajear a la saga Final Fantasy, en vez de tratar de reproducirla.

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