Men of War: Assault Squad
Bautismo de fuego.
Te engancha, te hace volver y consigue que aprendas de tus errores. Tras unas cuantas partidas, la curva se vuelve más bien una línea horizontal. Cuesta entrar en la dinámica de juego, pero una vez dentro se pueden apreciar todos sus matices y disfrutarla muchísimo.
Pasaremos de ser un blanco fácil a un sabio de la artillería ligera y pesada; de un soldado con un cartel en el que pone "disparadme" a un mago con el francotirador. El paso es mágico.
Una vez en este estado zen, será sólo cuestión de tiempo el acabar capturando todos los puntos estratégicos de cada mapeado y conseguir puntos, ya que es así como se consiguen las victorias. Siempre.
Sólo hay una ocasión en que el objetivo parece ser diferente: en la introducción. Esta falta de variedad en el planteamiento de los niveles se intenta suplir, con más o menos éxito, con el diseño de los mismos. La guerra nos llevará por diversas y variadas localizaciones donde cada esquina, cruce de caminos y puesto fortificado están situados de manera clave para ofrecer una ardua resistencia a nuestras acciones.
Además las unidades enemigas adaptarán sus tácticas para contrarrestar las nuestras e derribarán trincheras, casas, árboles y lo que haga falta con sus cañones para pillarnos por nuestro flanco débil. Destacar el nivel de destrucción que se alcanzan en las últimas pantallas. Literalmente, una ciudad entera puede quedar reducida a escombros.
El sistema de cobertura funciona correctamente y tanto los enemigos como tus propias unidades tienen cierta iniciativa propia en el momento de lanzar granadas, ocupar puestos de ametralladoras pesadas enemigos o realizar fuego de cobertura cuando se mueven demás unidades en el frente.
Tanto los diversos soldados como los vehículos y otras unidades especiales se muestran con unos modelados decentes, si bien un poco toscos al acercar la cámara. Hay unidades de a pie que son, literalmente, cuadradas. El nivel de detalle en el entorno es aceptable, pero lo que destaca más de la presentación es el apartado sonoro. Los efectos de las explosiones, de las balas y de algunos gritos están realmente conseguidos.
Para compensar la falta de contenido para un jugador nos encontramos con un modo multi online que ofrece lo mismo que el modo escaramuza pero con otros jugadores y con diversos modos de juego a escoger entre: control de zonas, combate, frente de batalla (los jugadores atacan y defienden por rondas) y finalmente el cooperativo, para hasta 8 personas, con las misiones del modo escaramuza.
En conclusión, este Assault Squad es una apuesta sólida dentro del género. Cuenta con muchas cosas que lo harían brillar si no fuera por cosas como el modo escaramuza (que no campaña) o la burda y poco cuidada, aunque efectiva, interfaz.
Recomendable para los seguidores más acérrimos de los RTS y para todos aquellos con valor suficiente como para superar el bautismo de fuego que supone el primer contacto. Aquellos que lo consigan se encontraran con un juego adictivo, divertido y altamente satisfactorio.