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La sorpresa de Sony

Y no es la PSP2: PlayStation Suite podría cambiar el juego en móviles.

Es una gran idea, y algo que finalmente justifica ese Xperia Play que veíamos como un producto confuso durante las últimas semanas. Era difícil ver la razón por la cual un desarrollador querría dedicar esfuerzo extra para crear software para el Xperia Play - sea el PlayStation Phone o no era un único smartphone en un mercado muy amplio. ¿Pero desarrollar un juego Android de gran calidad para su distribución en la PlayStation Store, siendo el Xperia Play una más de las plataformas? Eso es mucho más atractivo tanto para creadores como para usuarios, y algo que finalmente explica la presencia del Xperia Play en ese ecosistema.

Falta por ver lo seria que será Sony con la PlayStation Suite, pero asumiendo que la firma tenga un compromiso verdadero con la idea y esté dispuesta a dedicar tiempo de desarrollo y dinero para marketing, tiene el potencial para ser algo que cambie significativamente el videojuego móvil. Ahora mismo, aunque Android posee una base y sigue creciendo, el iOS de Apple es la elección a seguir si quieres jugar. Se debe a una combinación de factores - la fragmentación de dispositivos Android, por ejemplo, y el hecho de que el Android Market sea visto como algo mucho menos atractivo que la App Store por los desarrolladores.

Crear una certificación y un sistema de control de calidad, junto con la PlayStation Store como plataforma comercial central, y llenarla con juegos first-party y de catálogo para asegurar que haya algo para todo tipo de jugador desde el primer día, tiene el el potencial de ser un movimiento rompedor en este mercado. Algunos dirán, con cierta razón, que va en contra de lo que ha definido el éxito de los juegos móviles en los últimos años - desarrollo y publicación rápidos junto con un camino directo al consumidor, sin las restricciones de un vigilante. Pero porque Sony no siga esa línea no significa que no pueda convertirse en un peligro serio para el dominio de Apple. Algunos consumidores están dispuestos a cambiar un poco de libertad por una garantía de calidad - un concepto que le debería ser familiar a Apple, puesto que su negocio se construye alrededor de eso.

PlayStation Suite, podrías pensar, es la pieza final del puzzle que supone la estrategia de Sony. Permite enfocar la PSP2 sin las limitaciones que estarían impuestas por una competencia directa con los dispositivos iOS - permitiendo crear un dispositivo sin la funcionalidad de teléfono e incluso sin que sea tan "portátil". Al extender PlayStation a otros productos móviles, Sony puede permitir de forma segura a la PSP2 ser un producto premium para el público demográfico de gamers sin tener que temer la pérdida de la batalla por ganarse al jugador casual.

En cierta forma lo que Sony ha hecho esta semana es justo lo que pocos esperaban - ha superado a Nintendo. Pese a la emoción que rodea a 3DS habría que ser excesivamente optimista para pensar que igualará el éxito de DS - cuyos números de ventas, sospecho, representan el tope al que llegará una consola portátil. El impacto de los smartphones e iPods en el mercado ha sido demasiado grande como para permitir que una consola portátil pueda volver a alcanzar esas cifras.

En este contexto, el ataque por dos frentes de Sony es increíblemente inteligente. PSP2 será una delicia para los tecnófilos, jugadores hardcore y fans de PlayStation, y con franquicias aparentemente aseguradas como Metal Gear Solid o Monster Hunter parece una apuesta segura para ese público. Mientras, Sony ofrece al mercado casual y a una enorme cantidad de consumidores que solo quieren un aparato en sus bolsillos una propuesta diferente - la experiencia PlayStation en su teléfono Android, una puñalada en el corazón del mercado de Apple, y una respuesta a un reto de mercado del que Nintendo ni siquiera es consciente todavía.

¿Funcionará? Solo el tiempo lo dirá, pero no hay duda de que Sony se enfrenta a un reto que requerirá mucho tiempo, esfuerzo y dinero durante los próximos años. El premio, sin embargo, es tentador: una posición dominante en el smartphone como plataforma de videojuegos, sector en el que estarán la mayoría de teléfonos en los próximos años. Si Sony lo consigue, tendrá control sobre un lucrativo mercado y se habrá ganado a millones de jugadores - sin necesidad de haber tenido que crear una plataforma de hardware en el proceso.

Traducción por Josep Maria Sempere.

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